La poesía me salva. Pero no es gratis ese milagro. La pago minuto a minuto con la aceptación obscena de mis temores y mis deseos. (Valeria Pariso)

Raíz.

A ella no sólo le gusta la poesía, ella es poesía.  ¡Si pudieras verla en su cajita! Animal y ángel, suavidad y prisa. Corazón y carne, tempestad y risa. ¡Si pudieras verla en su cajita! A ella no sólo le gusta la poesía, ella es poesía. Y daría la vida, claro que daría la vida. Es tan terca y es tan linda. Se saca la ropa como si se sacara una espina. Ignora los relojes y el mal clima. Se sabe de memoria sus defectos. Le gusta la verdad y te cocina. No sabe cocinar pero te cocina. Ella es un payasito inquieto. Y es bastante demasiado incomprendida. Con la misma intensidad con la que quiere ser sencilla. ¡Si pudieras verla en su cajita! ¡Enorme! ¡libre! ¡eterna! ¡tuya! Se me llenan los ojos de barro. Ella es el pajarito y el árbol. Ella es la que rompe esquemas. Ella es una herida abierta. ¿Por qué será que está tan sola? ¿Por qué será que está tan cerca? Diría Juan Gelman “¡hagamos un mundo para ella!” No podemos permitir que se apague. No podemos permitir que se pierda. ¿Dónde están los otros? ¿Qué podemos darle? ¿Cómo queremos verla? Porque se va, se va, y cuando se va no hay vuelta. ¡Si pudieras verla en su cajita! ¡rumbo a ninguna parte! ¡rumbo a donde vos quieras! Ella no es de este siglo. Ella no es de esta esfera. Pobre, hace lo que puede con sus disfraces y sus muecas. Si pudiera le regalaría una bandera. Blanca como sus huesos, blanca como su espera. Le estoy llenando de tierra la vereda. ¿Podré acercarme? ¿Podrá escucharme? ¿Podré quererla? ¿Qué puedo darle? ¿Qué va a decirme? ¿Quién vive en ella? ¿Me pensará alguna siesta? ¿Le dará bronca mi bronca? ¿Le dará fuerza mi fuerza? Ella no es de este siglo. Ella no es de esta esfera. Intenta pero no puede, es más fuerte que sus piernas. ¡Si pudieras verla! ¡Si pudieras ser mosca, tapita, bombilla, moneda! Quizás, tal vez, le perderías el miedo y aprenderías a quererla. Pero como se deben querer las cosas que valen la pena. ¡Hey! A ella no sólo le gusta la poesía… ella, además, escribe poemas.


Sube y baja.

encuentro la llave y digo "fuego"
encuentro la llama y digo "calma"

que alguien me esconda la semana
no quiero ver cómo la gente
le da forma a su rutina
carcomiéndose las entrañas

no quiero abandonar este lenguaje
donde todo es posible y donde nadie me extraña

no quiero resumir diciendo "casa"
yo lo que quiero es caer sobre la nada y entender las circunstancias
sólo caer sobre la nada y entender las circunstancias

sube y baja
sube y baja

me dice "hola"
le digo "gracias"

Carta.

Quiero que me respire, que su tacto me empuje y me tire.
Quiero que me abra, que me escupa su furia y su calma.
Quiero que me escuche, que me toque y subraye palabras.
Quiero que se traiga, quiero que me ofrende su cuerpo y su alma.
Quiero que resuelva sus malditos desastres cotidianos (reventada).
Quiero mirar cuando se mira.
Quiero saber cuándo me olvida.
Quiero aprender sus siete caras.
Quiero que no nos alcancen los días.
Quiero que siempre nos sobren mañanas.
Quiero que crezca y que juegue.
Quiero que juegue y que crezca.
Quiero que siempre confíe en mis luces y mañas.
Quiero entender sus errores y sus sombras.
Quiero aceptar sus dolores y mis ramas.
Quiero que me escuche, quiero que me respire, quiero que me abra.
Quiero que se quede cerca mío cuando todo se derrumba.
Quiero que basta, basta, basta, basta.

Ovillo.

Me limpio, llego a casa y me limpio.

Busco mantras. Te adivino.*

Baile incierto. Baile mío.

Toco el techo. Toco el piso.

Me controlo. Me desquicio.

Veo verbos. Bebo vicios.

Me controlo. Me repito.

Me vomito. Me vomito.

Llego a casa y me vomito.

Pierdo mantras. Te desquicio.

¡Me arrepiento! ¡Te acuchillo!
¡Me arrepiento! ¡Te acuchillo!
¡Me arrepiento! ¡Te acuchillo!

Me asesino. Me asesino. Me asesino. 
Me asesino. Me asesino. Me asesino.

Y así sucesivamente hasta perder el hilo.

Hasta perder el hilo.
Hasta perder el hilo.

*hey, nena, te vuelvo algo divino

Yes.

te miro como se miran las cosas que te pueden romper

Confiesa.

días en los que vivo porque no me queda otra
comprendo todo tanto que no quiero disfrazarme de otra cosa

quiero sentirme una con el todo
quiero arrancarme las mentiras y la ropa

urgente: algo que me sostenga a la tierra

todo es transitorio: esta casa, este cuerpo, esta espera

demasiada lucidez, nena

(¿cómo puedo hacer para dejar de escribir poemas?)

Hay una distancia.

hay una distancia que no se cura con nada
hay caras que me miran y nada
hay voces que me invitan y nada

hay una distancia que no se cura con nada

yo no pensé que a (r) marme era esto
sentirme lejos
sentirme ajena
sentirme extraña

hay una distancia que no se cura con nada

¿y mis cosas? ¿y tus barcos? ¿y mi casa?

yo no pensé que iban a abandonarme tanto tanto tanto
yo no pensé que el tiempo era esto
sentirlos lejos
sentirme ajena
sentirme extraña

yo no quería
yo la quería
yo me ignoraba

hay una distancia que no se cura con nada

me sirven y no me sirven las palabras

estás opaca (y estás brillante) y estás olvido y estás cansada

no viene nadie
no encuentro luces
no sé tu frente
no llegan cartas

¿alguien dijo "luces"?
¿alguien dijo "cartas"?

hay una distancia que no se cura con nada

¿cómo querés que te diga que estoy rotundamente sola y excedida de alma?
¿cómo querés que te invite a mi vida si no suelto mis cosas, si te cuesta ignorarlas?
¿cómo querés que te llame si no tengo boca?
¿cómo querés que te gane si no gano nada?

hay una distancia que no se cura con nada

y cada día estoy más lejos
y cada vez estoy más blanca

no sé si me explico
no sé si me entienden
no sé si hago falta

hay una distancia que no se cura con nada

¿y mis cosas? ¿y tus barcos? ¿y mi casa?
¿y mis puentes? ¿y tus pasos? ¿y mi espalda?

¿por qué siempre yo esperándote?
¿por qué siempre yo esperándola?


Faltó.

faltó que se sacuda
faltó que se despeje
faltó que se derrumbe

me caigo en su gran miedo recurrente

falté a decir verdades elegantes

al menos las de siempre: las más hondas

quizás me hubiera dado una pestaña

(volvimos a perdernos sin buscarnos)

Renglón.

Che Dios, ¿por qué soy este vacío que se extiende sobre vos?

Elefante.

¿qué cara tengo que usar?
¿qué palabra tengo que decir?
¿qué puerta tengo que patear?




"no podrás esconderte nunca más"




un elefante me rasca la espalda

se lleva una parte

me puede aplastar

No es fácil ser un espejo.

La energía está, pero a veces vas, vas y te estampás. No es fácil lidiar con el más acá. No es fácil tener infinidad de voces en la cabeza que te pateen todo el tiempo el tablero. No es fácil observar tu modo de andar y comprenderlo. No es fácil decirte "me parezco a vos pero no tanto", "respetáme un poco pero no me tomes tan en serio". No es fácil ser un espejo. No es fácil mirarte a los ojos y verte por dentro, ¡en sólo un segundo verte por dentro! "¡sé absolutamente que soy un puto soñador!" [Ringggggggggg] Se terminó el tiempo.

Barcos.

cuando
pienso que
me va a clavar un puñal

splash


me clava
un abrazo

Demián.

"El amor no era un oscuro instinto animal, ni era tampoco una piadosa adoración espiritual. Era ambas cosas. Ambas y mucho más, era ángel y demonio, hombre y mujer en uno, hombre y animal, sumo bien y profundo mal."


Tus regalos deberían de llegar.

Mirá, yo no sé si la poesía será mi lugar. Lo único que sé es que por algo estoy acá, de cara al pasto y al papel, asesinando hormigas y algo más, pensando en fantasmas que no saben contar hasta diez y volar. Sucede que vivo en una casa de piedra, y un poco de ternura no vendría nada mal. Me congelo por dentro y por fuera, y estoy de pie pero caída, con los brazos en señal de libertad. Si esta ciudad hablara pediría sangre o piedad.

No queremos decir cosas lógicas, queremos una caricia, palabra o mirada, que nos haga temblar; un milagrito gigante, una razón para andar. Sucede que vivimos en casas de piedra, y dormimos muy poco, o dormimos muy mal, y no queremos planchar el disfraz que nos hace transpirar y cobrar. Queremos quedarnos desnudos, mirando paredes vestidas, jugando a perder o a ganar. No queremos salir a tener un nombre o un rumbo. Queremos detener el tiempo y que se aquiete, de una buena vez por todas, el mundo; ¡arrancarle las sesenta agujas a ese reloj inmundo! y darle la espalda y ser libres, y darle la mente y ser puros. No queremos despertar y que nos inyecten la rabia, el bostezo y los números. Queremos saber qué se siente ser propios, queremos saber qué se siente ser suaves, queremos saber qué se siente ser niños; con la entrepierna llena de pelos o religiosamente podada ser niños, con las manos llenas de tierra y la esperanza explotando en las venas ser niños. No queremos, en el fondo, las pantallas que nos tapen el paisaje y el camino. Queremos estar solos y sentirnos fuertes, queremos estar fuertes y sentirnos dignos. No queremos la mentira y no queremos el olvido. Queremos mirarnos de ojos cerrados y poder decirnos “esta piel se parece a la mía”, "¿te das cuenta?", "¡somos lo mismo, somos lo mismo!"
Porque, al fin y al cabo, tampoco queremos sentirnos diferentes. Tan sólo queremos que nos vean distinto.

Eso. Tan sólo queremos que nos vean distinto. Somos lo mismo, nena, somos lo mismo.

Sigo entre las piernas de mi vieja.

Sigo entre las piernas de mi vieja y no hay nada más preocupante que el olvido. Cuando no pueda más con su cuerpo y yo la mire de costado, pero aparezca, quizás comprenda que no pude amarla más porque no bastaban los momentos. Y si una lágrima es respuesta a mis reproches la pondré en un frasco junto con las mías y le mostraré al fin mi mundo. Digamos que el espanto es una alternativa, pero los milagros bailan todo el tiempo y puede que me saquen a yirar justo cuando alista sus castañuelas y pasiones más sensatas. No negaré que me duele en todo el cuerpo su distancia. No entiendo cómo es que permite que se rompa tan fácil un cordón que alimenta no sólo mis más pálidas e históricas carencias sino mis recientes encrucijadas que la buscan como nunca. La vieja me clavó tantos puñales en el alma… que tengo que organizarlos para no subestimar a la tristeza. Y es una buena idea para un martes, mala para un lunes, innecesaria para el resto. Porque tampoco debo empapelar cientos de días con su soberano desamor, incluso cuando sienta necesarios los ajustes del recuerdo debo de ser cauta con el desborde, no asomarme demasiado a las heridas si, al fin y al cabo, va a llover desenfrenadamente en mi colchón. Cuidar las palabras, el alma, la vejiga.

El ego me importa un carajo.

abrí la puerta y aposté a las lágrimas

¿y si me busca?
¿y si me llama?

necesito distancia, orden práctico y algo de elegancia


necesito clavos y constancia

necesito luces y palabras esperadas meditadas reventadas

"¿para qué?"


no sé


algo tengo que hacer con tanta "magia"


el ego me importa un carajo, no me eleva, no me calma


lo que yo quiero y necesito es


un lugar

donde la eternidad
no sea sólo una palabra

Suele ser duro aprender.

te dije que iba a volver

y mirá que me aplastaste

y mirá que fuiste cruel
y mirá que me ataste de piernas y manos
y me dejaste en la calle
y me arrancaste la fe

te dije que no iba a olvidarte

te dije que iba a crecer

te dije que iba a dolerme tu furia

te dije que iba a dolerte mi ser

suele ser puta la vida


suele ser duro aprender

Cansancio.

no hay nada más terrible
que un cuerpo cansado y un alma vibrando

quiero decirte algo
pero mis piernas me dicen "demasiado por hoy"
"no hace falta que destruyas su orgullo"
"¡es de ella, no tuyo!"

y mis piernas son sabias
y tus lenguas son largas
y mis manos son tercas
y mi alma es mi alma

Sencilla.

zen + silla

hay que cerrar el día
hay que terminar con lo que nunca se termina
hay que apagar el ruido y entender la vida

"y la más complicada enseñanza no lleva sino a la perfecta sencillez de una melodía"

La comunicación es fiebre.

¿Te das cuenta? Todo se mueve, no somos los mismos, no son más las nueve, 20:33, todavía no son las nueve, da igual, "¿llueve o no llueve?", si no te despierto un poco me sobreviene la fiebre. La comunicación es fiebre. Y el silencio, según el rincón, es incomodidad, paz, dolor o cosa de tipos inteligentes (esto no es un diario, idiota, esto es un papel pegándose en tu frente). Luz intermitente, luz intermitente. Casa templo, noche suave, días breves. La calle te espera. La sueltes o no la sueltes. "¿Cobarde o valiente?" No me muestres los dientes si vas a morderme. Casi que creo tener la experiencia suficiente, 20:44, y no soy batman, techo prepotente. Yo miro tus ojos con el alma aprisionada y, entre otras cosas, se cómo y cuándo mutilarte las espadas, "¡guarda!", no me interesa tu sangre, a mí me interesa tu cara. Esa que ponés cuando no hay nada de nada. Cuando te quedás solito de cara al gran silencio que te espanta. Pero no importa, no me hagas caso, "no voy a llevarte los ojos al alma". Ésa jungla perdió la gracia, agustina, olvidá la militancia. El adentro es más amable y más sensato. Y no te confundas, somos inocentes, no santos. Dale, dale, dale, saltá tus propios charcos.

No quiero rodar como una piedra.

No hay manera. La vergüenza me gana todas las carreras.

Soy un pollito mojado pidiendo no verte al final de la escalera.

No quiero rodar como una piedra.

Vos sabés bien cómo es esto: sólo encuentro lapiceras.
Y las palabras me lastiman. Y las palabras no se entregan.
Por eso no te busco y por eso no te llegan.

¿Te das cuenta? No hay manera.

Somos víctimas de un tiempo con gangrena.
Somos átomos plagados de mentiras.
Somos ángeles asqueados de miseria.

Maltratamos a la madre. Maltratamos a la tierra.

Por eso las palabras no nos hablan. Por eso las estrellas no nos llenan.

En mi propia tierra.

quiero que sepas que no me gustan las pantallas
quiero que sepas que prefiero el silencio y el sol
quiero que sepas que, por más que lo haya dicho miles de veces,
es cierto que a veces me arrepiento
y creo que no soy más que un color
sólo un color

quiero que sepas que esto tampoco es lo que te quería decir
tan sólo es una excusa radiante para contarte que "el patio de mi vieja tiene un sol"

y al lado mío hay una caja llena de cuadernos y papeles
que te hablan de mí
que me hablan de vos

no puedo mentirte

soy una extranjera

todo me envenena
todo menos vos

No hay pan que tape el aujero.

hay quienes por pensar se distraen
y quienes por distraerse no piensan

yo igual no tengo nada que ver con todo esto

Pierdo.

me pierdo y pierdo

¿qué pierdo?

pierdo

(h) ay

escribo para quedarme sin cara
y estoy cansada

estoy sola y no tengo nada
(soy arquitecta de mi propio destino)
(nadie me regala nada)
(ojo, no estoy sacando nada en cara)
(dijiste dos veces las palabras "cara" y "nada")

quiero una casa (de verdad una casa)
quiero pisar esta careta idiota que me ofrece el caníbal del mundo
quiero salir de este mundo

quiero que hables conmigo
una noche
que hables conmigo

que me veas fuera de este traje inmundo
(que me cuentes tus sueños y que cuentes conmigo)

quiero que me escuches

yo sé que todos tenemos nuestras cruces
y nuestros clavos
y nuestras bocas

pero yo estoy repleta de anécdotas rotas
y hoy no quiero sentirme agradecida por lo poco que tengo
hoy quiero exigirle un poco de tu amor al viento

que te empuje
que se callen
(no, ¡que se mueran!)
quiero verlo (s)
(a ellos aplastados y a vos amaneciendo)

y te hablo a vos (sí, a vos) (nariz sin dios)
y a todos los que puedan comprenderlo

necesito una nueva forma de ganarme tu tiempo

vos pensarás que "digo mucho pero no digo nada"
y yo digo que "ya dije demasiado pero no te alcanza"

por eso me quedo a pelearla (sin caretearla)
como puedo y con lo que tengo
(miradas, silencios, palabras)

y no todo es tan fácil como parece
a veces me duele la cabeza y el alma

y a veces me olvidan
y a veces me rindo
y a veces no hay armas

y entonces no puedo dispararle a nadie
y entonces no puedo dispararle a nada

y me quedo en silencio
(escuchando a los perros)
metida para adentro
putrefacta
cabizbaja

y siento ganas de hacer algo por el mundo
y siento ganas de mirarme y ver tu cara

a mí no me interesa la belleza
a mí me interesan las almas

y tu cara es la carta de presentación de tu alma
tu cara y la cara de todos
tu mano y tu mano en mi espalda

vos no te das una idea de la cantidad (calidad) de cosas que podemos hacer juntas

si pudieras verme
hace un par de horas lo único que quería era cavar un pozo y meterme adentro
y tuve que hacer lo de siempre: rendirme ante el papel y hacerle frente

a la vida hacerle frente

si querés aprender mucho y crecer desde los cuatro puntos cardinales
recomendación de amiga: ni se te ocurra perderme

ni se te ocurra perderme

Triángulo.

1 - estuve meditando y saqué demasiadas conclusiones

2 - a veces tengo tanto miedo de mis convicciones


3 - yo quisiera volver a sentirme habitada por un nombre

Diccionaria.

debería no ser tan autobiográfica

debería perdonarme
debería contemplarla

a la vida
con sus ojos de perro

famélicos
retozones

“¡despiadada!”

debería contemplarla

Reventar o creer.

¿quién salvará mi fe?
¿quién podrá decir “te preparo un café primero y mi beso va después”?

¿quién podrá con este cuerpo?
¿quién sabrá no ser tan cruel?

¿quién salvará mi fe?
¿quién salvará mi fe?
¿quién salvará mi fe?

Magia.

¿Dónde está la mano que dibuja el sol y tus manos?
¿Y por qué nos dejaron tan solos y desamparados?
¿Qué habrá del otro lado? ¿Qué habrá del otro lado?
¿Y por qué nacemos mudos? ¿Qué es lo que no quieren que digamos?

Toda mi existencia es un puñado de preguntas.

Y vos, claro, sos respuesta que no puedo encontrar nunca.

Sin embargo hay una calma que termina con la rabia,
y esa calma sólo es calma, no se ensucia con palabras,
dice todo sin decirlo,
te presenta y te desarma.

¿Dónde está la mano que dibuja idiota estas lágrimas?
¿Por qué queman y no mojan? ¿Por qué vuelven y no estallan?
¿Quién me puso este corazón de rosa? ¿Y quién permitió las piedras?
¿Y quién me detuvo el alma? ¿Y quién me complica el habla?

Ay, basta, basta, basta.

¿Dónde está la mano que me tape la boca?
¿Dónde está el caminito que me lleve hasta casa?

Toda mi existencia es un puñado de esperanzas.

Esperanza no estés lejos.
Esperanza duela (s) menos.
Esperanza no te caigas.

Mañana seré otro universo.
Mañana seré otra muchacha.

Sin embargo ¿por dónde anda, mientras tanto, la mano que subraya tu nombre y te alcanza?
¿Será que la distraje en esta tinta? ¿Será que la cerré sin decir nada?
¿Dónde está la boca que me tape la mano?
¿Dónde está la llave que me muestre la casa?

Esperanza seas la llave.
Esperanza seas las luces.
Esperanza abracadabra.

“¡Abracadabra, abracadabra!”

¿Dónde está la boca que me tape la mano?

¿Dónde está la llave que me muestre la casa?

El juego del miedo.

Yo no tengo vergüenza, yo paseo mi dolor como a un perro.
Y día tras día, después de caminar por mi casa y por mi vida, lo alimento.

¡Momento!

Esto no es lo que yo quiero.
Esto no es lo que me cura.
Esto no es lo que yo quiero.

Ladra. Muerde. Miedo.























Voy a terminarme. ¿Para qué jugar el juego?

Traé caramelos.

quiero ser tu siesta

ya sé que "es tarde y lejos"
pero no sé si voy a durar mucho tiempo


























traé caramelos

Nadie es capaz de matarte en mi alma.

estoy bien

distendida

y, de repente, tu cara
y, de repente, tu danza

vomito mariposas y manzanas







“nadie es capaz de matarte en mi alma”

Necesito.

necesito raíces
cosas que me conecten a la tierra





¿quiero florecer o ser tu piedra?

Unos quieren y otros son.

Para el cobarde todo es demasiado amor.

No hay descanso.

Leo en voz alta, como siempre. Mientras junto moneditas pa´ contarte que soy fuerte. Pero tengo malos dientes. Y, a veces, me vuelvo desgraciada y deprimente. Con la misma intensidad con la que soy independiente. Me aburro de la gente, me aburro de la gente. Y quiero verte. Y quiero entenderte. Pero ¿cómo explicarlo? Esto no es lo que parece. Hablo de las paredes, de los papeles que me cuidan, de lo blanco, de lo negro, de lo turbio, de lo verde. Hablo porque sé que cumplo un rol y sos mi hermano. Hablo porque (¿ves?) somos lo mismo, aunque no nos encontramos. Y me importa tres pepinos transformar en víctima al victimario. Yo perdí toda mi euforia en ese barro. Y a veces quiero matarlos, a veces quiero matarlos. Pero no muevo ni un dedo porque sé que son de palo. Idiotas. No me ensucien más los ojos. No me toquen más las manos. Ya no bailo, ¿ven?, ya no bailo. Yo perdí toda mi euforia en ese barro.

Tenéme paz.

Nunca te puedo decir del todo la verdad, porque no existe la verdad. Sólo te puedo decir “gracias por estar”. Aunque nunca llegues a los huesos de esta gran ciudad. Sabés que yo estoy bien si me pierdo y si no me olvidás. (Yo siempre te voy a mirar, aunque no nos podamos escuchar). En las canciones te encuentro (siempre) y en el paisaje no estás. No me importa. Sé que de esto se trata crecer (+ soltar). Que te extrañe no quiere decir que te vaya a buscar. Nos conocemos, sabés que no me puedo mover de mi lugar. Por eso hago estos puentes que son fáciles de atar. Porque quiero verme quieta y porque quiero caminar. Algún día voy a llegar. No sé adónde. Pero algún día voy a llegar. Tenéme paz. Tenéme paz.

Del amor yo sólo sé que la quería.

Yo sola. Me estoy cortando las alas. Yo sola.
¿Hasta dónde puedo llegar si me devoran tus monstruos?
¿Y por qué la tierra gira? ¿y por qué existen las horas?
¡Demasiado complicado es este mundo!
Me da la convicción de que sufre todo el tiempo (lo estamos asesinando) (no es joda).
Me da la convicción de que llora a toda hora.
Por eso me corto las alas. Yo sola. Yo sola.
Porque del amor yo sólo sé que la quería.
Pero la vida es puta cuestión de geografías.
Se está cerca o se está lejos.
Punto.

Cómo duele.
Que no duela.
¿Te da risa?

Y este cuerpo no me sirve.
Y este rey no me comprende.
Y esta mina no me mira.

Voy a perder la rima en tus ojos.

Lo dije.
¡Eureka!
Lo sabía.

¿Y por qué existen tus ojos? ¿y por qué la tierra gira?

Demasiadas preguntas para tan poquita vida, Agustina.

Ella va a dolerte en todo el cuerpo.
¿Entendido?
Te coronen de verdades o te coronen de mentiras.

¡Ok!
¡Basta!
Quiero terminar con todo esto.

Voy a cortarme las alas. Toda la vida. Yo sola. Toda la vida.

Porque volar bien lejos engendra tu espanto.
Porque volar bien hondo me llena de espinas.

Punto.
Cómo duele.

Ay. Que no duela.
Ay. ¡Te lo dije!
Ay. ¿Lo sabías?

Luz mental.

"Cortázar tenía razón..."

tengo la paz de quien sabe
que da todo sin mirar atrás
tengo la paz de quien se equivoca
y no siempre busca rimar
aunque la rima llegue igual
y una vez más la poesía no salve la vida y la edad

¡ay, ella!

no toca cuerpos sino almas
no sabe herirte sino amar

¿cómo explicar?

cada cual tiene su vicio y su lugar

cada cual cuida su nido interno
su fe de noche
su luz mental

¡no te caigas, compañero!

“si te tiran migajas hacé pan”

No quiero romper esto.

A

Nada me pertenece.
Y esta casa también va a abandonarme.

E

¿Cómo hago para llegar a destino sin perderme en el viaje?

I

Somos todas esas cosas que no pueden explicarse.

O

Que sea azul, que no haga sangre.

U

Me muero por saber si me entendiste.
Me muero por saber si me escuchaste.